lunes, 30 de agosto de 2010

Km. 268 Summer Tale 5 (Bacalado y Cola Cado en Bilbado)

Ya que nos pillaba relativamente cerca, este verano hemos decidido "culturizarnos" con una visita a Bilbao, más concretamente al Guggenheim (porque después las féminas decidieron que ya estaba bien de cultura y se fueron de compras).

A la salida del museo en cuestión me preguntaron por mis impresiones... Para curarme en salud citaré a mi profesor de Educación Plástica en la Universidad, que nos decía que quien fuera capaz de definir la palabra arte estaba automáticamente aprobado con Matrícula. Es decir, cada persona tiene su propia definición de arte y es prácticamente imposible que dos versiones coincidan completamente.

Dicho esto he de decir que mi contestación fue "pché", había cosas muy interesantes, pero también había un gran número de cosas que, a mi humilde e ignorante ver, no tenían nada de artísticas. Me sirven para explicarme dos de las colecciones temporales que se exhiben actualmente: La de Henri Rousseau me pareció bastante buena mientras que la mayor parte de la de Anish Kapoor me produjo desde indiferencia hasta risa pasando por el cabreo de considerar artístico el disparar pintura y cera con un cañón (¿a quién no le molaría hacerlo alguna vez?)

De la exposición de Robert Rauschenberg mejor no hablo:

En el corral de la casa de mi pueblo hay una igual.

Gracias Homer. GRACIAS.

En cuanto a otras cosas que se pueden ver en el museo, un pequeño resumen:

A la entrada te recibe Puppy, el sistema de riego por goteo hace que parezca que el perro babea.

Ante todo la realidad, arquitectónicamente, el edificio es la caña.

Entre todos los nombres que he oído que le ponían a esta obra me quedo con "Los Globitos" y "Los Espermatozoides".

Andar entre estos mamotretos de acero hacía que perdieses los sentidos de la orientación y del equilibrio. Encima, que las explicaciones del audioguía las diera Constantino Romero lo hacían más bizarro.

Directamente sacada de La Guerra de los Mundos.

Pues eso, que muy gonito.

Pero Bilbao es más, mucho más que su museo. Bilbao son calles estrechas, pintxos, la Ría y su paseo y muchas otras cosas que os enseño en otras cuantas fotografías antes de que me mandéis a paseo:

Me recuerda un huevo al edificio de Metrópolis, en Madrid.

Calles estrechas.

La Catedral.

El Paseo a la orilla de la Ría de Bilbao, esta foto me gusta.

Pues eso, me dio rabia ir a Bilbao y no visitar al tío Xabi, otra vez será.

A cascarla.

3 comentarios:

Xabier Durden dijo...

Cachis la mar... que pena que no nos hayamos encontrado, te hubiera invitado a alguna copa y tal. Bueno, otra vez será. Geniales las fotos :)

Me alegro que te haya resultado interesante; pero ya sabes, avisa la próxima vez mamón, te daré mi telefono si quieres, pero avisa xD

Un saludo.

Nahus dijo...

Ya ves tío, el problema fue que no tenía internet en Santander y me avisaron de que íbamos muy tarde, así que no me pude buscar un locutorio o algo por el estilo

Mcnalgas dijo...

Me alegra que saques las estrechas calles de Bilbado, pero de te has olvidado de las mujeres estrechas de Vizcaya que son casi una institución según el vaya semanita.